Absurda esperanza

Tomaste como un juego más
dejarme una falacia al día
durante toda la vida que
contigo a mi pesar compartía.

Por más que esperé
nada llegó desde cielo;
con cada y todas las cosas que,
de ti para mí,
yo a Dios le pedía,
solo él sabe que pasaría.

Te aprovechaste tú
de mi excesiva confianza,
de mi andar siempre a ciegas.

Sabías cuanto a mí me costaba
cargar ya con mis pies que
solo llevaban absurda esperanza.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Descubre más desde Piereh Antoni

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo