Estuve tan cercana a morir,
era imposible poder respirar,
mi alma a prisa se consumía.
Me iba a dejar consigo llevar,
sin él, sin su aroma conmigo,
la vida comenzaba a perder.
No existía el querer continuar,
tan pronto me di cuenta de todo
su engaño… para vivir dejaría.
Fui solo un mal juego así,
un vil pasatiempo,
pudiendo al mundo abrir mis ojos, al fin.
Cobarde se fue, matando cada ilusión,
y malos momentos pasé,
su sentimiento era irreal.
Nada le era importante,
nunca lo quiso aceptar,
no supo corresponder lo que de mí le di.
Cobarde se fue, rompiendo el corazón,
su amargo recuerdo lloré,
nunca amó de verdad.
Deja un comentario