Prestado

Es toda mi dicha
el con amor verte crecer,
el recordar con nostalgia
el paso número uno que tú diste,
el escuchar yo de ti
las primeras palabras que dijiste;
brillan mis ojos llorosos
al verte cada día feliz.

Es tanta la alegría que siento
por tenerte aquí tan junto a mí,
por poderte acompañar
en tu búsqueda y
aleccionadores tropiezos,
en los alcances de todos,
todos tus más queridos sueños.

Tú eres el tesoro
más valioso que
esta vida pudo haberme dado,
un ángel de esos, uno prestado.

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